En el requerimiento a juicio consta que ambos hombres, padre e hijo, a lo largo del tiempo y de manera reiterada, vulneraron la integridad sexual de una menor de edad desde que tenía 10 años, de quien eran padre y hermano respectivamente, con distintos actos, los cuales finalmente fueron denunciados.
Al hombre de 26 años también se lo acusó de someter a tocamientos impúdicos a otra hermana menor de edad.
En el veredicto, el juez Mario Maldonado condenó a ambos acusados a cumplir una pena de 11 años de prisión de ejecución efectiva y en el mismo fallo se dispuso la extracción de material genético de los condenados por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato Único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.-